1. El campo y sus expectativas

Es cierto que en Colombia nunca han existido políticas agropecuarias a pesar de su vocación para explotar el campo en diferentes sectores, pero la culpa no es solo del Estado sino también de personas, y me refiero a todos aquellos que explotan la tierra de una u otra forma. Son pocos los sectores que han logrado descollar, aún en medio de todas las dificultades. Y esto lo han logrado por la determinación que han tenido en adquirir nuevos conocimientos, implantar nuevos procesos de producción, buenas prácticas, etc.

Es increíble que Colombia, con una capacidad de conversión en biomasa de 365 días de sol, con 3 millones de kilómetros en ríos, quebradas, caños no haya podido desarrollar el sector pecuario (piscicultura - acuicultura) de una manera relevante y protagónica. Contamos con todas las bondades para producir miles de toneladas cárnicas derivadas de los peces, y todavía estamos en la época de la atarraya.

Mientras esto sucede, en nuestras latitudes, en otros lugares, como en Israel, están produciendo hasta 30 toneladas de proteína animal (peces) por hectárea. Con un agravante, no tienen agua, no cuentan con dos periodos de lluvia, y escasamente tienen 100 días de sol al año, motor principal, generador de oxígeno.

Pero, no se trata de exponer pro y contras sino de invitar a todos los emprendedores que deseen incursionar en actividades acuícola a ser pro-activos en buscar el conocimiento, cultivar con denuedo y devoción la exploración en la Web para hallar nuevos conocimientos en el adelanto de la actividad.

Si no hay voluntad de cambio, de asumir con total determinación y responsabilidad el desarrollo de la acuicultura es mejor que de un paso al costado. Cultivar peces no es echar peces al agua y dejarlos a su deriva, y mucho menos al cuidado displicente de unos mayor-dueños, que reciben el encargo con total desidia por ser una carga mas entre sus labores de campo.

Señores emprendedores, pocos sectores ofrecen tantas posibilidades de éxito a la hora de enfrentar la demanda de productos. En Colombia el consumo es mas alto que la oferta de peces, con un crecimiento sostenido de 15 % anual. Mientras esto sucede el consumo de carnes rojas cae dramáticamente. Señor ganadero, esta es la oportunidad para revaluar la viabilidad y sostenibilidad de su finca.

“Lo único constante es el cambio": Heráclito